Un paseo escolar en un centro vacacional termina en luto y consternación para la comunidad educativa del Liceo San Rafael.
El pasado viernes 13 de septiembre, una jornada de alegría y aprendizaje se tornó en tragedia para un grupo de estudiantes de primaria del Liceo San Rafael, ubicado en Ciudad Jardín, Bogotá.
Samuel Rivas, un niño de seis años, perdió la vida tras ahogarse en una piscina durante una excursión en el centro vacacional El Bosque, en Silvania, Cundinamarca.
La excursión, que prometía ser un día de diversión y esparcimiento, se convirtió en una pesadilla cuando Samuel fue hallado sin signos vitales en el agua.
Según el coordinador del Liceo San Rafael, Phillip Espejo Silva, el incidente se descubrió cuando los docentes notaron la ausencia del niño durante el almuerzo, alrededor de las 14:15.
A pesar de los esfuerzos inmediatos por parte del personal del colegio, Samuel fue trasladado al Hospital Ismael Silva de Fusagasugá, donde se confirmó su fallecimiento.
La comunidad educativa del Liceo San Rafael ha expresado su profundo dolor a través de un comunicado en redes sociales: «No hay palabras suficientes para aliviar este inmenso dolor. Nuestro corazón está hecho trizas, solo busca consuelo en el amor y en la misericordia de Dios».
El Ministerio de Educación de Colombia ha señalado que los docentes y directivos tienen una responsabilidad legal y ética sobre la seguridad y bienestar de los estudiantes, tanto dentro como fuera de las instalaciones educativas. Esto incluye salidas académicas y actividades extracurriculares que forman parte del proyecto educativo institucional.
En este caso, las autoridades correspondientes están investigando el incidente para determinar si hubo algún descuido por parte del personal docente que contribuyera a la tragedia. La institución educativa podría enfrentar responsabilidades legales si se demuestra negligencia en el cuidado de Samuel durante la excursión.
El accidente de Samuel Rivas muestra la importancia de la vigilancia y seguridad en actividades escolares y deja una profunda herida en la comunidad del Liceo San Rafael y en todos los involucrados.