Por: José Eliécer Palomino Rojas.
Después del fallecimiento de Don Juan Bosco un 31de enero de 1888, la espiritualidad del gran maestro de la juventud, desde las raíces antiguas, se mantiene y se desarrolla a lo largo del paso de los tiempos, con la energía viva, animadora y transformadora, que siempre caracterizó a Don Bosco y, energía que muchos docentes, y directivos, comunidades educativas y religiosas, en la actualidad desearían poseer, energía llena de afecto, ingenio, inventiva en donde él se hacía para los demás.
Como familia de la I.E. María Josefa Marulanda, que practica y vivencia los valores, virtudes de San Juan Bosco, con la filosofía de Francisco de Sales, en torno a la celebración del guía, orientador y maestro de los jóvenes, Don Juan Bosco, con oraciones, recordatorio de frases y un arreglo floral que, obsequió la familia Grajales Gallego, de la Floristería el Rosal, a la I.E. Majoma del municipio antioqueño colombiano, se homenajeó de forma sobria pero sentida, al sacerdote y educador italiano, quien fuera una de las primeras figuras que la iglesia también rinde admiración, respeto y afecto al comienzo de cada año.
Unas de las frases inspiradoras de San Juan Bosco para su querida juventud fueron:
«Ser bueno no consiste en no cometer ninguna falta, sino saber enmendarla».
«Para trabajar con éxito, ten gran caridad en el corazón y paciencia en la ejecución.
«Alegría, estudio y piedad: es el mejor progreso para hacerte feliz y que más beneficiará tu alma».
Los padres de familia, estudiantes, docentes y directivos de la María Josefa, tienen la certeza que este año 2023, llega acompañado de grandes experiencias, grandes proyectos, grandes logros y grandes oportunidades, que continuaran fortaleciendo el aprendizaje de los estudiantes y maestros, a través de la práctica y vivencia de los valores y virtudes salesianos.
Caminando de la mano de la madre celestial María Auxiliadora y San Juan Bosco, los estudiantes y comunidad general, serán mediante su recorrido «Buenos Cristianos y Honestos Ciudadanos.» Shalom. Jepardini.