Tres reconocimientos clave que configuran conquistas históricas del magisterio colombiano. Se trata de la prima de servicios, la bonificación pedagógica (o unificación) y la nivelación salarial.
Por: Redacción Educación | Especial Magisterio
En este mes de junio, cuando los calendarios escolares dan paso al receso académico, los docentes del país no solo piensan en descanso, sino también en lo que, por derecho y por lucha sindical, deben recibir: tres reconocimientos clave que configuran conquistas históricas del magisterio colombiano. Se trata de la prima de servicios, la bonificación pedagógica (o unificación) y la nivelación salarial.
Aunque cada una tiene su fundamento legal y aplicación particular, muchas dudas siguen circulando entre educadores y directivos docentes. Por eso, desde Redacción Educación de la REEA aclaramos qué son, cómo se aplican y qué debe hacer el docente para verificar si le corresponde o no.
Prima de Servicios: una conquista que no siempre llega sola
La prima de servicios es un reconocimiento económico equivalente a 15 días de la asignación mensual del docente o directivo, calculada con base en el salario vigente al 30 de junio del año en curso. Este beneficio está reglamentado desde el Decreto 1545 de 2013, pero solo comenzó a aplicarse efectivamente después de 2015, como resultado de la movilización sindical liderada por FECODE.
Para tener derecho a esta prima, el docente debe haber prestado sus servicios en una misma entidad territorial certificada (ETC) por un periodo mínimo de seis meses continuos. Si ha estado en varias ETC o su tiempo es menor, la prima no se reconoce o se paga de forma proporcional.
🗣️ “Esta prima se liquida hasta el 30 de junio y se paga durante los primeros 15 días de julio. Es fruto de la lucha de FECODE. Antes de 2015, no existía. Es un logro que mejora las condiciones económicas de los docentes”, señala José Gonzalo Puin, asesor de la Federación.
El llamado es claro: verificar la historia laboral y estar atentos al pago en julio. Si el tiempo cumplido corresponde, la prima debe aparecer en el desprendible de nómina.
2. Bonificación Pedagógica 2025: Unificación que alcanza el 29%
Otra de las conquistas económicas más significativas para el magisterio es la bonificación pedagógica, también conocida como unificación. Este pago tiene como objetivo reconocer de manera progresiva el aporte pedagógico diferencial de los docentes y directivos docentes, y para el año 2025 su valor asciende al 29% del salario básico mensual, como lo establece el Decreto 1316 de 2024.
Este beneficio no se paga automáticamente a todos los docentes, sino solo a quienes hayan cumplido un (1) año de servicio continuo desde su fecha de vinculación al cargo. Es decir, si un docente fue nombrado en octubre de 2024, aún no cumple el tiempo requerido en junio de 2025 y, por tanto, no recibirá la bonificación este mes,sino cuando cumpla el año.
🗣️ “Hay que aclarar que esta bonificación incluye a docentes del 2277, del 1278, etnoeducadores, raizales, palenqueros, afrodescendientes y negros. Mientras sean docentes en servicio, esta bonificación se paga”, explica Puin.
Además, constituye factor salarial, lo que significa que incide en cesantías, primas, pensión y liquidación, y se calcula con base en la asignación básica mensual del docente.
3. Nivelación Salarial: 1,6% adicional que fortalece tu ingreso
La nivelación salarial es una de las reivindicaciones más estructurales del movimiento sindical docente. A diferencia de las primas o bonificaciones, esta se trata de un incremento permanente al salario básico, resultado de acuerdos suscritos en años anteriores.
Para el año 2025, el Gobierno Nacional —según el Decreto 0617 del 3 de junio— reconoció un incremento adicional del 1,6% sobre el ajuste ordinario por inflación (IPC) que se concede a todos los servidores públicos.
🗣️ “La nivelación salarial ha sido fruto de FECODE durante estas dos últimas décadas. Se ha logrado gracias a paros y negociaciones con diferentes gobiernos. Representa puntos adicionales a los del incremento estatal tradicional”, afirma el asesor sindical.
Estas tres medidas son logros colectivos y no concesiones graciosas del Estado. Por eso, los docentes tienen la responsabilidad de informarse, hacer veeduría y consultar con sus sindicatos filiales cualquier inconsistencia.
FECODE, por su parte, exige al Ministerio de Educación y a las entidades territoriales que cumplan con los pagos de manera oportuna, y que no dilaten ni condicionen derechos adquiridos tras años de movilización.