Hace cinco años tumbaron las paredes de un colegio con la promesa de mejorar los salones, pero todo quedó ahí. Los niños tienen que recibir las clases en carpas.
Al colegio Divino Niño de Úmbita en Boyacá hace cinco años les prometieron nuevas aulas y el mejoramiento de una sede que hoy, tiene a cambio de obras, carpas.
«Tenemos habilitadas dos carpas para la toma de las clases de los estudiantes, cada una para 20 estudiantes y son carpas de 3 x 3″, señaló el ingeniero Eberfrancks Torres Espitia, líder de la comunidad.
Las clases son tomadas en toldos y los estudiantes señalan que además de la ausencia de salones, tampoco hay espacios donde jugar.
El fondo de financiamiento de infraestructura educativa señaló que la obra se entregaría el próximo 25 de noviembre y que todo obedece, según ellos, a retrasos.
«Esta institución educativa de Úmbita hace parte del convenio que el Gobierno Nacional realizó en el año 2016 con el gobierno departamental, para la construcción de 26 colegios. He sabido que desde el año 2016 los contratistas tuvieron una serie de inconvenientes y en el 2019 se reasignaron los proyectos a diferentes entidades contratistas entre ellas g19 que en este momento tiene la construcción de este colegio», aseguró el arquitecto Enrique Camargo, director del FFIE (Fondo de Financiamiento de Infraestructura Educativa) en Boyacá.
La ilusión no termina para los estudiantes y padres de familia que claman una rápida intervención y una ayuda divina para que las obras no queden en el olvido.
Fuente: Noticias RCN