Bogotá, abril de 2025 – La Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (FECODE) ha encendido las alarmas frente al uso de los bonos escolares en el país, advirtiendo que esta figura representa un alto riesgo de corrupción y clientelismo político. A través de una pieza comunicacional divulgada en sus redes, el sindicato denuncia que esta modalidad permite a algunos políticos, con la complicidad de funcionarios, asignar cupos y recursos públicos a colegios privados de forma discrecional.
Según FECODE, los bonos escolares —presentados en ocasiones como una alternativa de acceso a la educación— pueden convertirse en mecanismos de manipulación electoral. “Se asigna a un colegio privado un número predefinido de estudiantes y un monto estimado por cada uno de ellos”, señala el sindicato. Esta entrega, denuncian, se devuelve luego en forma de apoyo electoral, presionando a las familias que reciben el “beneficio”.
La federación sostiene que este sistema no solo debilita la educación pública, sino que también reproduce prácticas corruptas y genera desigualdad al favorecer a instituciones privadas mediante recursos que deberían fortalecer la escuela estatal.
Frente a esta preocupación, FECODE anunció que intensificará la movilización social para defender el presupuesto público destinado a la educación y evitar que el modelo de bonos erosione los principios de equidad y acceso universal.
“Rechazamos con contundencia cualquier intento de privatización disfrazada. La educación es un derecho, no un negocio”, subrayó uno de los voceros de la organización.
FECODE, que agrupa a miles de docentes en todo el país, hace un llamado a la ciudadanía y a las organizaciones sociales a sumarse en la defensa de la escuela pública, gratuita, democrática y de calidad.
